Desde que empezó el verano se pueden ver y escuchar a estos simpáticos animales que atrapan insectos al vuelo insectos en parques, jardines, bosques y montes de la Europa. Vienen cada año desde el centro y sur de África buscando el buen tiempo y la mayor disponibilidad de alimento, para nidificar.
En España nos visitan dos especies en concreto, el chotacabras pardo (Caprimulgus ruficollis) y el chotacabras gris (Caprimulgus europaeus). El primero, algo más grande y con tonos pardos, el segundo como su nombre común indica, de tonos grisáceos. Ambos presentan una coloración críptica que les permite pasar desapercibidos durante el día, ya que son especies crepusculares que aprovechan la oscuridad para cazar.
A nuestro centro ya han llegado varios de ambas especies, algunos con lesiones y otros aun demasiado jóvenes como para valerse por sí mismos. Estos animales requieren cuidados especiales, ya que hay que alimentarlos manualmente dos veces al día y manejarlos con extremo cuidado puesto que son aves muy nerviosas que pueden perder plumas con suma facilidad.
Ponen siempre dos huevos de los que salen dos pollos, se trata de una especie nidífuga, por lo que aparecen en los caminos, y aunque parezcan abandonados, no necesitan nuestra ayuda. En ocasiones aparecen atrapados en naves y sótanos de donde no consiguen salir y acaban golpeándose intentando encontrar la salida.
Si encuentras alguno y crees que necesita ayuda, no dudes en llamar al 91 479 45 65 en horario de oficina o al 670 93 32 40 si es una emergencia. Como con cualquier ave, procura no darle nada de comer o beber puesto que no sabemos si está deshidratado o tiene alguna lesión. Mételo en una caja de cartón con agujeros y busca un lugar tranquilo donde dejarlo hasta que vayamos a por él.