Aun ponía febrero en el calendario y llegó el primer pollo de cárabo (Strix aluco) de 2019. Ya nos habían llegado noticias de algunos ingresos de pollos de esta especie de nuestros compañeros de AMUS y viendo el inusual buen tiempo que nos acompaña, era cuestión de días que llegara el primero a nuestro centro.
Se trata de un ejemplar de morfo pardo, que a pesar de estar un poco bajo de peso, no presenta ninguna lesión o afección. Apareció en Aranjuez. Pasará unos días en la enfermería cogiendo peso y en cuanto comprobemos que su test coprológico es normal saldrá a una instalación exterior donde se encontrará con sus padres adoptivos, individuos irrecuperables, que le enseñarán a ser uno más de su especie.
Gracias a la generosidad de la gente y sus ganas de colaboración, este pequeño pronto tendrá un padrino o una madrina que se le asignará de la lista de espera, que por fortuna crece cada día. Cuando esté listo, será esta persona la que le devuelva a la naturaleza. También sus padres, a pesar de ser irrecuperables también tienen la suerte de contar con padrinos y madrinas que cada año se hacen cargo de su manutención. A todas estas personas les estamos enormemente agradecidos.
Aprovechamos desde Brinzal para recordaros que los juveniles de las rapaces nocturnas, a las 2 o 3 semanas de vida, suelen hacer reconocimientos de su territorio bajo la atenta mirada de sus padres, por lo que si no aparece en un lugar peligroso para el animal o en el que pueda entrar en conflicto con el ser humano, o si no está herido, NO debes cogerlo.