Como cada año cientos de ejemplares de rapaz nocturna ingresan en nuestro centro con distinta problemática. Destacan los pollos huérfanos, que forman el grueso de este tipo de aves en el  Centro de recuperación de rapaces nocturnas. Ahora que ya están completamente desarrollados, es tiempo de suelta de búhos huérfanos.

Primera suelta de los búhos huérfanos de este año

Un año más vamos liberando a los huérfanos de las distintas especies que ingresan en nuestro centro durante la primavera. Ya se han liberado varios juveniles de cárabo europeo (Strix aluco), todos los de búho chico (Asio otus) y varios de búho real (Bubo bubo).

Este fin de semana seguimos con la liberación de los primeros juveniles de autillo europeo (Otus scops) que se sueltan de forma directa.

Por otro lado están los juveniles de lechuza común (Tyto alba), criados en nuestro centro dentro de nuestro programa de Cría en Cautividad. El proceso de cría con la especie se desarrolla en nuestras instalaciones de forma natural, separadas para cada pareja, estimulándose la puesta mediante el uso de presa viva.

El emparejamiento, la cópula y la mayor parte de la crianza se llevan a cabo por los progenitores. Únicamente intervenimos durante la incubación y los primeros días de vida de las pequeñas lechuzas, para evitar problemas en las etapas más delicadas. Cuando cuentan con más de 20 días de vida son liberados mediante el método de Hacking.

Esta técnica consiste en colocar los pollos en un habitáculo o nido artificial en el que crecerán. Puede ser una cabaña, un barril desfondado, una caja nido, recamara, etc.

Debe cuidarse la orientación de la abertura para proteger el interior de las inclemencias del tiempo, del sol directo y de la lluvia. Los pollos se introducen cuando aun no han completado su desarrollo pero son capaces de comer por sí mismos. Idealmente, los individuos podrán ver el exterior pero sin poder escaparse. El hacking puede aislarse con malla, red, etc.

Diariamente se abastece con suficiente comida, siempre con cuidado y sin asustarles, preferiblemente sin que nos vean. Cuando los pollos han crecido como para poder volar y cazar por sí mismos, se abre el hacking para que puedan salir.

Progresivamente irán intentando cazar. Si no han tenido éxito, siempre pueden volver al hacking en donde tienen asegurada la comida.

La permanencia al lugar queda asegurada tanto por la estancia anterior como por la alimentación suministrada. Progresivamente irán comiendo menos del hacking (a medida que vayan cazando en el exterior) hasta que no vuelvan a él. El proceso de independencia es relativamente parecido al que ocurre en la naturaleza (de modo gradual y a medida que son capaces de valerse por sí mismos).

Esta es una excepción, ya que la mayoría de los individuos de las otras especies son huérfanos, que la gente se encuentra en lugares problemáticos (piscinas, parques muy concurridos, colegios, etc.) y traen al centro de recuperación de rapaces nocturnas de BRINZAL. Aquí son criados por las nodrizas, adultos irrecuperables que por sus lesiones no pueden ser liberados, pero que cumplen la importante función de padres adoptivos.

Así, son ellos quienes alimentan a los pequeños y los enseñan a comportarse como uno más de su especie.

Este año estamos muy preocupados con los mochuelos (Athene noctua), una de las especies más elegidas para el programa de apadrinamientos. Mientras que en años anteriores los ingresos de esta especie oscilaban entre los 35-50 individuos entre enero y agosto, este año en las mismas fechas sólo han ingresado 16. Esto da una idea de la regresión que está sufriendo la especie.

Cabe la posibilidad de que las lluvias del mes de junio hayan tenido que ver en la pérdida de puestas de este año. Estaremos atentos a la evolución de la especie.

Cada ave recuperada cuenta con mucha ayuda

Queremos agradecer a todos nuestros socios y socias, que con su apoyo hacen posible que todas estas pequeñas rapaces salgan adelante, así como a los padrinos y madrinas que contribuyen con su aportación a la compra de medicamentos y alimentos para sus apadrinados. Nos encanta que participen en cada suelta de búhos huérfanos.

Es muy gratificante ver la emoción en las caras de las personas que liberan a cada ejemplar y las de sus familiares que les acompañan.

Esperamos que esta nueva generación de rapaces nocturnas puedan salir adelante y tener una vida larga y plena.

 

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